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lamia

Tu mano... en mi espalda

Amor ¿puede ser? No lo sé.

Quizás mañana.

Despierto y estás ausente,

me evado en misterios de luna.

Busco una esperanza.

De día recuerdo promesas calladas.

Al atardecer, cuando el sol se acaba,

tu piel, cuero fibroso, protege mi alma.

Tu brazo en mi espalda; cinturas... opuestas.

Pasos que doy, mi mano en tu rostro.

Mirada profunda.

Fluido de vida que derrama savia.

Camino de nuevo en el alba encendida.

aunque esa luz que atisbo,

soplo victorioso,

me resulta extraña.

Tu mano me enlaza y, haciendo un requiebro,

exhausta abandono el camino de hielo, perlado de escarcha.

En el resplandor de esta madruga,

cuando el rocío lava excesos de almohada,

tu mano en mi espalda calienta mi alma.

8 comentarios

Montse -

Muchas gracias por el poema, y sobretodo la última frase, que se me ha quedado grabada. Gracias ^^

Lamia -

Hola Francisco, bienvenido a mi casa. Me alegro de que te guste. Sólo siento que, metida de lleno en la vorágine del día a día, ahora tengo menos tiempo para escribir. Vuelve por aquí cuando tengas un ratillo

francisco -

Precioso poema.
Un saludo desde esta isla del centro de Europa.

carlos -

gracias por pensar en nosotros y dejar algo que llene tu ausencia. feliz estío.

Lamia -

Me alegra saber que os ha gustado.
Aunque me gusta contestaros a cada uno, me vais a permitir que hoy lo haga en conjunto. Estoy quemando mis últimos cartuchos porque a partir de mañana estoy de vacacaciones hasta el día 9 de septiembre.
Me voy a descansar y a cargar las pilas para empezar un año lleno de proyectos y de iniciativas. Os voy a dejar un relato para que no me olvidéis durante los próximos días. Espero que os guste. No sé si podré entrar en el blog durante estos próximos días pero si no, a la vuelta, más y.... espero que mejor. Besos.

unjubilado -

Precioso poema, y bendita mano que a todos sana.

Nerim -

La mano del amor, a todos nos toca, a todos nos tienta, a todos nos llama y a todos nos alcanza, mucha manga ancha tiene el amor.
Un abrazo
Nerim

laMima -

La mano del amor, que todo lo templa....que, aun en sueños, sana.