Aún noviembre
Noviembre, en silencio,
impone sus reglas.
Y el dolor que trajo el otoño
no cede espacio al invierno.
Hay una herida profunda,
que traspasa incluso la niebla más densa.
En la noche, que corre lenta, el alma busca razones que el corazón desprecia.
La bruma cubre el espacio.
Y por debajo, pidiendo excusas,
quedan palabras:
escritas, susurradas, ignotas.
Sin embargo yo... No tengo nada.
Sólo silencio.
Sólo la niebla, el corazón, el alma.
Y la pregunta.
Incorrecta. Suspendida. Sin respuesta.
2 comentarios
Lamia -
amigoplantas -
Las hojas del haya reposando por fin