Blogia
lamia

Cumpleaños

- Cosas que me gusta contar

 

P. nació hace doce años, un día como hoy. Pasado el tiempo, empiezo a pensar que fue a partir de ese momento cuando mi vida inició una senda que me ha llevado por paisajes agrestes en los que la ternura y el amor de P. me han ayudado a crecer. Él es sin duda la persona que más me preocupa y, sin duda también, la que más alegrías me aporta.

 

Cada mañana, aún cuando su físico y su mente corresponden a un muchacho de doce años, sus ojos, azules como un día de primavera y herencia de esa parte del Norte que lo habita, me hablan de una inocencia intacta, de un amor incondicional.

 

Por todo eso, por su sonrisa, por su alegría, doce años después sigo pensando varias semanas antes de que llegue este 19 (un 19 dichoso por fin) cómo puedo sorprenderlo y de qué manera conseguiré que éste vuelva a ser un día especial. Y en esta tarea consigo implicar también a su abuela, sus tíos, sus primas, sus amigos, los míos, mis compañeros... Y así, cada 19 de febrero, viéndolo feliz, crece en mí un orgullo tan profundo como incondicional es el amor que le profeso.

 

E intento que perdone mis ausencias, mis enfados, que me olvide de comprar sus plátanos, que nunca recuerde las citas con el dentista o el pediatra, que siempre llegue la última y me vaya la primera de las reuniones del colegio, los momentos que empiezo a robarle porque los necesito para mí, el día que olvidé ir a buscarlo al autobús, las mañanas que salgo corriendo antes de que termine su desayuno, las alubias verdes y las espinacas de bote, las conversaciones por teléfono interrumpidas, los fines de semana cambiados...

 

E intento que entienda que no he tenido elección.

 

 

(La canción, antigua antigua, le encanta. Y nos hace reír a ambos siempre que la escuchamos juntos. Y juntos la cantamos a voz en grito).

9 comentarios

Sofi -

Feliz día para todos, especialmene para P. Seguro que es un día inolvidable. Un saludo

amigoplantas -

Ni te preocupe eso, la evolución tiene que continuar, antes o después (de una forma u otra) tendrá que romper lazos, y para eso utilizará como herramienta el "encabronarse" contigo

Eso es lo probable

Y es parte de la evolución personal del hombre

Paco Sánchez -

Muchísimas felicidades para el chaval y para ti. Se ve que sois un regalo el uno para el otro. Festejadlo mucho

Lamia -

Carlos, es verdad, yo le quiero mucho y el todavía me dice que me quiere también. Supongo que habrá unos años que se le olvidará y espero que luego vuelva a recordarlo.

Nerim, guapa, gracias por tus felicitaciones y tus consejos. Y por volver siempre por aquí.

Gracias por tu visita, Santiago. Tu hermano es de las mejores personas que he conocido en los últimos tiempos. Y tanto a él como a Cristina les he cogido mucho cariño. Y la verdad es que pasamos buenos ratos juntos. Espero que vuelvas.
Un abrazo.

Santiago García Tirado -

Saludos, Lamia. Y de paso, ya veo que hoy estáis de cumple. Pues que lo paséis bien.
Y recuerda, no creas mucho de lo que te diga Javier: miente como sólo un hermano sabe mentir. Pero le quiero tanto...

Yo también volveré por este blog. Seguro que hay mucho que hablar.

Otro saludo

Nerim -

Muchas felicidades tanto a tu hijo como a su mamá. Todos los padres cometemos fallos en la educación de los hijos. Superar la etapa de la adolescencia por dificil que pueda ser, se cura con mucho cariño, paciencia, y sobre todo, con mucho sentido del humor.Eso y darle la "vuelta a la tortilla" oportunamente es lo que más me ayudó a superar las dos adolescencias de mis hijos.

Un fuerte abrazo

carlitos -

P. Quería felicitar a P, también a su madre. A ambos felicidades. La adolescencia es un pequeño brote de "malhumor" que se cura con dos cosas: un poquito de tiempo y mucha paciencia. El resto es amor, y parece que os sobra a los dos para regalaroslo mutuamente.

Lamia -

En ello estamos Ángel mientras se deje. Porque, según me cuentan, la adolescencia que está a punto de llegar amenaza con complicarlo todo.

angel -

Feliz cumpleaños campeón.
Disfrutaros mutuamente siempre se está a tiempo de compartir y hablar, sobre todo comunicación.
Te hechamos de menos nosotros también un abrazo y dos besos.